Ella estaba tan confundida que callo rendida al piso, admirando la majestuosidad de su obra, de su juego preferido.
Luego de un rato logro reaccionar y con timidez toco el cuerpo, noto lo frío que estaba, asustada retiro su mano rápidamente. Luego de pensarlo, volvió a tocarlo, esta vez sin miedo ni timidez y asumiendo lo que había echo. De sus ojos brotaron unas pocas lagrimas, pero llenas de rencor y odio hacia ella misma. Deseaba estar sola, sentir aquello que hace un tiempo remoto había sentido. Pero se había excedido, había perdido a la única persona que la amaba.
En el fúnebre cilencio de esa habitacion por ultima vez se escucho un suspiro, un grito, y un fuerte golpe contra el piso. Ella calló tan fuertemente como el plomo, sus ojos se cerraron, y el cuchillo quedo clavado en su cuello.
By. Sweet Madness